jueves, 12 de enero de 2012

Segundos



Acabo la tarde, el tiempo se agoto y todo se disolvió. No es lo único que recuerdo, también recuerdo tu mirada cargada de odio dirigida hacia mi... no tuve miedo en ese momento, NUNCA tengo miedo.
Alce la vista para ver mas aya de tu cuerpo y lo vi, por un momento dude en si de verdad era ella o cualquier otra chiflada, pero no me equivoque.Venia hacia ti desafiante, armada y con ganas de destrozar todo lo que se le presentara por delante...-No, no lo hagas- pensé.
Demasiado tarde, ya estabas tirado en el suelo como perro perdido.
Dos lagrimas vi en tus ojos, después te escuche toser y luego, de nuevo, vi salir de tu boca una cascada color de rosa.
-Emiley, te amo, por favor...suelta eso - dije.
Lo soltó y vino a mis brazos.
De repente tuve miedo, estaba a punto de perder lo mejor de mi vida y de echo lo perdí. Tu me la arrebataste, no dudaste ni un segundo en apretar el gatillo, aunque te salio mal la jugada. Lo que querías era matarla y que yo siguiera sufriendo toda mi vida pero la bala nos atravesó a los dos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario